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Entre los alquimistas que se destacan en pleno siglo XX, encontramos un insigne médico
alemán, al Dr. Arnold Krumm Heller, persona humana, o bodhisatwa de un gran y
milenario Ser, cuyo nombre esotérico, corresponde al V.M. Wiracocha.
Sus obras místicas y científicas entreabren inicialmente la puerta de la transmutación
integral, tal cual la encontramos en su obra: "Rosa Esotérica", donde en alusión clara al
Ens Seminis, a la simiente sexual, al semen, dice: "Levantad bien vuestras copas, y cuidad
de verter ni siquiera una sola gota de vuestro precioso líquido".
Krumm Heller, sabía perfectamente que en el semen, se halla la potencia única que puede
liberar al animal racional, de su condición de bestia domesticada por la fornicación.
El Maestro Wiracocha, conocía perfectamente que en el semen se halla la energía viva de la
Divina Madre y del Cristo Interno; sabía el Maestro que el "precioso liquido" es el aceite
sagrado con el cual encendemos nuestra divina lámpara, con la que muy bien encendida,
podemos estudiar los misterios de la Vida y la Muerte.
Fue en esos tiempos de oscurantismo moderno, que el Maestro Wiracocha fundó
nuevamente la antiquísima fraternidad Blanca. Fue él, quien dio el primer y fundamental
paso para la organización de la Orden Rosa Cruz.
Bajo su sabia dirección, se abrieron templos y lumisiales donde los sedientos de Luz y
Fuego encontraron el bálsamo para su dolor.
El bálsamo fue dado a conocer por el insigne Maestro en todas sus obras, pero, es en su
libro más conocido, en su novela "ROSACRUZ", donde da a conocer la clave suprema de
la Transmutación Integral en el seno sacro del templo sexual.
Muchos lo leyeron y lo releyeron, y pasaron por el tesoro de los siglos, sin haber más que
mirado la gran dádiva del momento; todo, simplemente porque la maravillosa clave, fue
escrita en latín. Muchos se defraudaron... (por muy cómodos) y realmente pocos se
inquietaron ante las terribles, sencillas y divinas palabras y las tradujeron...
La frase enigmática decía:
"Introducir el miembro viril en la vagina de la mujer y retirarlo sin eyacular la entidad del
semen".
Explicando un poco la importancia de refrenar el acto, continúa el Maestro:
"El Rosa Cruz-Mago siente la misma excitación nerviosa al operar que otro ser lleno de
deseo. Si supieran los hombres lo que pudieran hacer en este momento de nerviosidad,
seguro que harían todo, menos seguir a la mujer".
Más adelante en su misma obra "Rosa Cruz", dice: "Los estudios de la Rosa Cruz nos
enseñan que el semen es el astral líquido del hombre, es la Vida, encierra el poder; pero un
poder tan inmenso, que sabiéndolo manejar, se puede lograr todo. Por eso es tan
importante conocer los secretos Rosa Cruz, pues se posee una arma poderosa contra las
adversidades del destino".
La magnífica exposición del sabio Wiracocha, fue, es obvio, ampliamente conocida por los
Iniciados y Maestros de todos los tiempos, y en todas las latitudes del globo.
El Dr. Krumm Heller como alma humana del Maestro Wiracocha, gracias a la
Transmutación Integral de su semilla sexual, logró llegar a las esferas albas de la Iniciación
y del Magisterio.
Todo el secreto se halla encerrado en la semilla y en la simiente sexual.
Es en la simiente donde se halla latente el poder divinal para regenerarnos totalmente, para
convertirnos en Dioses.
Dios es amor.
El Amor es sexual cien por cien.
Sólo los seres que saben amar, aprenden a manipular la energía sexual.
La transmutación integral es sexual cien por cien.
La castidad es sexual cien por cien. No puede haber castidad sin sexualidad. Donde hay
celibato o abstención sexual, no hay castidad.
Sólo hay castidad si hay amor. Es el fuego del Amor quien logra las más altas
sublimaciones de la simiente divina.
El fuego del Amor sólo puede ser encendido cuando hay plena y magnífica actividad
sexual.
Todo esto lo sabía el V.M. Wiracocha, y brindó a sus discípulos la clave máxima de la
Transmutación Sexual Integral, explicando en su magnífico "Curso Zodiacal", lección
octava, el modus operandi de la magia sexual (Magia, viene de Mag = Magisterio,
Maestro).
La transmutación Integral se la vive en profunda e intensa comunión íntima, entre un varón
y una varona unidos en Boda Mística, unidos sexualmente y bajo la mirada augusta de los
Elohim, sin embargo,"en vez del coito que llega al orgasmo, deben prodigarse
reflexivamente dulces caricias, frases amorosas, y delicados tacteos, manteniendo
constantemente apartada la más pura espiritualidad como si el acto fuera (y es) una
verdadera ceremonia religiosa", "sin embargo, puede y debe el hombre introducir el pené y
mantenerlo en el sexo femenino para que sobrevenga a ambos una sensación divina, llena
de gozo, que puede durar horas enteras, retirándolo en el momento en que se aproxima el
espasmo para evitar la eyaculación del semen, de esta manera, tendrán cada vez más ganas
de acariciarse" "Esto se puede repetir tantas veces, cuantas se quiera, sin jamás sobrevenir
el cansancio, pues todo lo contrario, es la clave mágica para ser diariamente rejuvenecido,
manteniendo el cuerpo sano y prolongando la vida, ya que es una fuente de salud con esta
constante magnetización".
"Sabemos que en el magnetismo ordinario, el magnetizador comunica fluidos al sujeto, y si
el primero posee esas fuerzas desarrolladas, puede sanar el segundo".
"La transmisión de fluido magnético se hace de ordinario por las manos o por los ojos;
pero, es necesario decir que no hay conductor más poderoso, mil veces superior a los
demás, que el miembro viril y la vulva como órganos de recepción".
"Si muchas personas practican eso a su alrededor, se esparce fuerza y éxito para todos los
que se pongan en contacto comercial o social con ellos, pero en el acto de magnetización
divina, sublime al que nos referimos, ambos, hombre y mujer, se magnetizan
recíprocamente, siendo el uno para el otro, un instrumento de música que al ser pulsado,
lanza o produce sonidos prodigiosos de misteriosas y dulces armonías. Las cuerdas de ese
instrumento están esparcidas por todo el cuerpo, y son los labios y los dedos los principales
pulsadores del él, a condición de que presida el acto la pureza más absoluta, que es lo que
nos hace magos en este instante supremo " (Curso Zodiacal: Lección Octava. Dr. A.
Krumm Heller.)
Hasta aquí el Maestro Wiracocha. De lo transcripto, se desprende clara e indiscutiblemente
que la Rosa Cruz hay que vivirla sexualmente, que la Orden Rosa Cruz es sexual cien por
cien.
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